Adriana Agudo Vicci |
2020 fue el año en que por cuarta vez, desde 1896, se suspendieron los Juegos Olímpicos. Las veces anteriores ocurrieron con motivo de las dos guerras mundiales.
Ahora en 2021 ante tantos cambios presentes en el mundo producto de la pandemia ocasionada por el Covid19, los JJOO se celebrarán con una excepcional particularidad: sin público. Esta ha sido la decisión de los organizadores ante el avance de los contagios por coronavirus.
Las medidas son en interés de unos juegos seguros para todos.
Esta decisión cuenta con el apoyo del Comité Olímpico Internacional (COI) y el Comité Paraolímpico Internacional (CPI) quienes han afirmado que las medidas tomadas son en interés de unos juegos seguros para todos.
Al día de hoy, la llama de los JJOO sigue su rumbo a Tokio desde Fukushima, lugar emblemático que refleja la recuperación económica de un país que vivió hace diez años momentos devastadores para su población y su economía.
Ante un reciente incremento de los contagios en Tokio, el gobierno no ha dudado en decretar la prórroga del estado de emergencia que entrará en vigor el lunes 12 de julio, situación que ha sido un duro revés para todo el conglomerado atento a los Juegos, incluyendo a los patrocinadores que contaban al menos con el público interno; sin embargo, un gran porcentaje del país reclamó que fueran suspendidos ante el inminente riesgo de volver a cifras incontrolables de contagio.
Bajo estas nuevas condiciones, acordadas por los organizadores y comunicada por la ministra japonesa para los Juegos Olímpicos, se ha establecido que solo podrán asistir los miembros del Comité Olímpico Internacional, miembros de honor y altos cargos.
Ante los ojos del mundo, la realización de los Juegos está llena de dudas.
Los acontecimientos y las noticias se superan unos a otros. Estaremos pendientes por el desenlace de este evento mundial: los Juegos Olímpicos 2020 y su ceremonia inaugural prevista para el 23 de julio a las 13:00, hora española.
